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martes, 29 de noviembre de 2011

La confianza no es buena compañera

Rafa Nadal habla y Juan Mónaco durante un entrenamiento 
Faltan días para que dé comienzo la Final de la Copa Davis en el Estadio de la Cartuja de Sevilla, y que enfrentará a España y Argentina sobre tierra batida, y son varios los focos de atención desde el pasado viernes cuando comenzaron a llegar los jugadores a la capital andaluza.

Uno de ellos, y tras el nivel demostrado en la pasada Copa de Maestro celebrada en Londres, es la actual situación física y anímica de Rafael Nadal, el número 1 español. Se le nota cansado, y hasta su tío/entrenador, Toni Nadal, ha asegurado que no está al 100%. ¿Qué hacer antes todo esto?, el jugador ya ha reconocido que necesitaba descansar y que estará al máximo nivel en los próximos días, algo que se espera desde la hinchada española.

No obstante, el papel del capitán de la selección española de la Copa Davis, Albert Costa, será más que necesario en el caso de que haya algún inconveniente de última hora. Si hace 7 años él mismo, que empezaba a despuntar, en aquella final de la Davis ante EE.UU. jugó puntos decisivos en el Estadio de la Cartuja y España consiguió la ensaladera, y con más inri hace 3, en Mar del Plata, y sin el balear se pudo conseguir la victoria, ¿sería un error el no contar con el de Manacor si no está al 100%?.  Verdasco, Feliciano o incluso el mismo Granollers, podrían en un momento dado sustituirle con garantías, más cuando Nadal llegará al mes de diciembre con un año más que agotador, y como el mismo John Carlin ha comentado este martes en un medio de comunicación "nada recomendable para un deportista de este nivel".

Con esto no quiero decir, ni descarto, la participación del actual número 2 de la lista ATP, pero en estas finales, que son de tres días, y en el que los que cada punto es importantísimo, se debe tener en cuenta el rendimiento de los propios tenistas. El ejemplo claro de la final de 2008 en Mar del Plata puede servir de ayuda. Del Potro y Nalbandián rozaban un tenis de fábula, pero los problemas físicos y algo de confianza, hicieron que los españoles (más humildes, todo hay que decirlo) se auparan con el triunfo.

Esta final no me da buena espina, sobre todo con varios comentarios  escuchado, como el del ex tenista Manolo Santana, que llegaba a decir que la eliminatoria se ganaba fácil con un 5-0, y si a esto le sumamos el sentimiento que envuelve desde hace semanas esta ciudad, con la ya mítica frase de "Sevilla ciudad talismán" que presagia que todo está hecho ante los argentinos.

Cabe recordar que la albiceleste viene con un nivel grande, rozando el mejor estado en años. Es por ello que tanto Juan Mónaco, como los propios Del Potro y Nalbandián han estado reservándose (algunos de ellos no estuvieron en el Masters de Paris-Bercy) por problemas físicos, y con ganas de 'vengar' el título 'birlado' hace unos años en su país.

Sin desviarnos del tema principal, la labor del equipo español en su conjunto será vital. Cada punto será muy disputado, pero está claro que si hay uno que puede estar más que decantado es el de dobles, que salvo sorpresa será para los argentinos, ya que no pierden desde hace bastantes eliminatorias. Es por ello, que la final verá su fin el domingo 4, y a mi entender tendrá muchas sorpresas en cuanto a sus protagonistas. No todo está escrito aún, el tiempo dirá.

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