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viernes, 24 de septiembre de 2010

El 'justiciero' vendido

Curiosa por no utilizar otro adjetivo como deleznable o impresentable. Así se puede considerar la noticia que llegaba a los oídos de todos los amantes al deporte el pasado martes. Byron Moreno, un arbitro ecuatoriano que ha sido internacional en campeonatos tan importantes como un Mundial de Futbol o en varias Copas Américas, fue detenido en el aeropuerto neoyorquino John Fitzgerald Kennedy por posesión de seis kilos de heroina cuando le chequeaban a su entrada en los Estados Unidos. Un hecho lamentable sin duda. 

Byron Moreno, que por el nombre no les sonorá, fue el arbitro ecuatoriano que designó 'justicia' en el partido de octavos de final del Mundial de 2002 de Corea y Japón en el que venció el país anfitrión, Corea, a la selección 'azzurra' gracias a unas acciones que quedarán en las retinas de todo aficionado, aunque en los 'tifosi' en mayor manera. Para aquel que no vio el partido fue el Al-Ghandour italiano.

Moreno, se convirtió en arbitro a los 18 años tras no poder triunfar como futbolista, y a los 26 ya era Arbitro FIFA, un honor a los que pocos pueden optar. Sus compañeros en Ecuador siempre lo tuvieron como un hombre 'muy propio', y  que su metdología a la hora de pitar un choque era muy propia, es por ello que se ganó el sobrenombre de 'justiciero'. Era capaz de todo. En 1997, en un partido de Copa América en el que jugaban las selecciones de Argentina y Perú expulsó a dos hombres de la albiceleste en solo dos minutos, el ex del Celta y del Cádiz Eduardo Berizzo y Gustavo Zapata ex de San Lorenzo o River. Una acción que pocos árbitros tomarían.

Pero este escándolo no es el primero en el que se ve involucrado, además del comentado y el ocurrido en la Copa del Mundo. Un año más tarde expulsó en un partido de Copa América que enfrentaba al Vasco de Gama frente al América de Méjico a seis futbolístas.  Pero más grave aún fue cuando Byron  Moreno tuvo la 'delicadeza' de añadir 13 minutos en la segunda parte del clásico ecuatoriano de 2002 que disputaban Liga de Quito y el Barcelona de Quayaquil sin tener los porqués para justificar tal acción. El choque que iba 3-2 cuando iban ganando los 'toreros' (asi se conoce al Barcelona), y terminó en es tiempo dando la vuelta al marcador el Liga de Quito por 3-4. Y para el asombro de todos ustedes, el trencilla falsificó el acta arbitral, ya que los dos últimos goles los anotó dentro de los noventa minutos.

Esto lo único que demuestra es lo peculiar que es esta persona. En Ecuador están abochornados con la noticia. Al ser un árbitro tan conocido, la noticia ha llegado a todo el mundo, y es pues que la figura de Moreno siempre será señalada no por lo bien que lo hacía sino por como lo hacía.

Ya pudo aprender de arbitros sudamericanos de renombre como el uruguayo Jorge Larrionda, el chileno Carlos Chandía o el argentino Héctor Baldassi. Eso por no hablar de Javier Castrilli. Para mí el mejor arbitro argenitino que nunca vi (Ver Mundial de Francia 1998). Esperemos que el caso de Byron se quede solo en eso, un hecho puntual y singular en Sudamérica, y que no ocurra nunca más.





                                                                                                                                     Javier Castrilli

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